El pleno del Congreso vota este jueves cuatro nuevas enmiendas transaccionadas sobre la enseñanza concertada en la Lomloe o ley Celaá, tres presentadas por PP y UPN y otra por PNV y Junts per Catalunya. Es el último paso para que se apruebe el dictamen a la ley Celaá en la Cámara baja.
La polémica porque se elimine en la norma "la demanda social" para poder abrirse centros concertadas u ofertarse plazas en ellos ha avivado las críticas de los partidos de la derecha pero también de algunos nacionalistas.
La enmienda transaccional de PNV y Junts per Catalunya especifica que las enseñanzas reguladas por esta ley se programarán por las Administraciones educativas teniendo en cuenta la oferta existente de centros públicos y la autorizada en los centros privados concertados. Y añade que las administraciones educativas "programarán la oferta educativa de modo que garanticen la existencia suficiente de plazas públicas, especialmente en las zonas de nueva población".
Por otra parte, previsiblemente saldrá adelante una enmienda por la que los alumnos de ESO deberán conocer el papel social de los impuestos y la justicia social con la asignatura de Valores Cívicos y Éticos de la reforma educativa del Gobierno, la Lomloe o ley Celaá. Se ha establecido así a través de una enmienda transaccional entre Compromís y Más País Equo y a la que se han unido PSOE, Unidas Podemos, Grupo Republicano y Junts per Catalunya.