El Tribunal Superior de Justicia de Aragón, después de anular este lunes la orden por la que el Gobierno autonómico imponía una serie de nuevas restricciones a la hostelería, ahora revoca la decisión y, finalmente, retoma las medidas iniciales: los bares y restaurantes deberán cerrar a las 23:00 horas, mientras que el ocio nocturno puede mantener su actividad hasta las 00:30 horas.
De este modo, la hostelería en Aragón vuelve a estar en fase 2 modulada, por lo que se retoman las medidas mencionadas (excepto en el caso de la comida para llevar), y sigue la prohibición del consumo en barra; el aforo en interiores debe ser de un 50% y el máximo de personas es de seis (interiores) y el 100% en terrazas, con un máximo de diez clientes por mesa.
Giro de 180º en 24 horas
Los servicios jurídicos del Gobierno de Aragón presentaron alegaciones ante el auto del TSJA de ayer, en el que el ente judicial se oponía al mantenimiento de las medidas. Así, daba la razón a la solicitud realizada por diferentes colectivos hosteleros, como la Asociación de Empresarios de Cafés y Barés de Zaragoza y provincia, o la Asociación Provincial de Salas de Fiesta, Baile y Discotecas de Zaragoza.
Esta resolución efectuaba cambios en lo que corresponde al sector, pero no al resto de normas referentes al nivel de alerta 2. Por su parte, el Gobierno de Aragón ha considerado que las medidas cautelarísimas iban a ser perjudiciales para los sectores económicos afectados. También, entre las justificaciones, radicaba que el ocio nocturno y los bares podrían formar parte del ascenso de los contagios, algo que los tribunales han rechazado, debido a que achacan la situación epidemiológica a los viajes de fin de curso.
Junto con eso, desde el TSJA aseguran haber escuchado a las dos partes y, tras rechazar en un principio las restricciones y luego aceptarlas, escriben: "Como no puede ser de otro modo, se hizo una valoración de la urgencia de las medidas solicitadas (...) lo que significaba valorar si no podía esperarse a su resolución por los daños que podía causar, no habiéndose realizado un análisis en profundidad".
Así, explican el porqué de una decisión tan rápida (por ser cautelarísima la solicitud), pero todavía no es una decisión definitiva, debido a que "las medidas no pueden perjudicar a quien las solicita". Ahora, contra esta resolución, se puede presentar un nuevo recurso en los próximos cinco días, que podría dar un nuevo giro judicial al asunto.