Una empresa gallega ha inventado lo que probablemente acabe siendo habitual encontrar en cada entrada o salida de grandes superficies o aglomeraciones en los próximos meses: un 'túnel de lavado', pero para personas.
Se trata de una especie de caseta que quien quiera atravesar tendrá que cruzar. La técnica es sencilla, las personas entran por el túnel y lo primero que hacen es desinfectarse las manos. Mientras, una cámara les toma la temperatura corporal.
Una vez se enciende una luz verde, la persona que lo atraviesa pasa al siguiente paso: ponerse debajo de un pulverizador de líquido desinfectante desinfectante. Tras atravesarlo, una superficie les desinfectará el calzado.
Esta técnica permite desinfectar la ropa y el calzado de cualquier persona, además de controlar su temperatura, uno de los síntomas más recurrentes en los pacientes con coronavirus.
El modelo ya está comercializándose y, de hecho, en los próximos diez días se va a instalar uno en Galicia y dos más en la Comunidad de Madrid.