El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este viernes la presentación del plan de vacunación contra el COVID-19 el próximo martes, el primer país junto con Alemania en hacerlo, pero ¿cuál es el momento actual de España con respecto a las vacunas?
El principal dato a tener en cuenta es que España está integrada en las negociaciones europeas con las farmacéuticas que están desarrollando los principales proyectos de vacuna. Esto supone un ahorro de los costes en los contratos y que, de todas las que consiga la Unión Europea, a España le corresponden un 10% de las dosis por población.
Pedro Sánchez prevé que la vacunación comience a principios de año y durante el primer semestre de 2021 ya se haya inmunizado a gran parte de la población. En concreto, ahora mismo España forma parte de tres acuerdos para la compra de vacunas: con Sanofi, AstraZeneca y Pfizer.
¿Cuántas dosis?
Estos tres contratos suponen un total de 1.000 millones de dosis para toda la Unión, mientras que las negociaciones con Moderna para hacerse con 400 millones de viales de su producto están avanzadas. España tendría al alcance un 10% del total, 140 millones de vacunas. Teniendo en cuenta que para una inmunización completa hacen falta dos inyecciones, con lo comprometido se podría inocular a los 47 millones de españoles y que sobren dosis.
Además, la UE se encuentra negociando también con la vacuna de Janssen (filial de Johnson&Johnson, de cuyo estudio en Fase III forma parte España), Novavax y Curevac. España tiene así siete vacunas en el horizonte.
¿Cuándo llegarán?
Sin embargo, y pese al compromiso en las dosis, estas no llegarán de golpe y no se sabe cuáles serán más efectivas. Pfizer, cuyo proyecto en fase III ha arrojado una efectividad del 95%, prevé que pueda fabricar 50 millones de dosis (para inmunizar a 25 millones de personas) este año, 1.300 millones el que viene. Por su parte, Moderna espera fabricar 20 millones de dosis para fin de año, y entre 500 y 1.000 millones en 2021.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ya anunció que la intención de España es comprar más dosis de la vacuna de las que el país necesita para "ir sobre seguro". "Compraremos todo el lote para estar seguros de que tenemos las primeras vacunas y de todas las tecnologías y, si sobran, en un ejercicio de solidaridad, las proporcionaremos a países que las puedan necesitar", señaló Illa la semana pasada.
El objetivo no es que toda la población española esté vacunada este año, pero al menos un porcentaje importante y, sobre todo, los grupos de riesgo, de manera que se puedan ir retirando gradualmente algunas de las restricciones para controlar la pandemia.
Según ha sabido laSexta, ese plan proyecta que los primeros grupos en ser inoculados sean los habitantes en residencias y también los sanitarios, en especial los de atención primaria. Las Comunidades Autónomas serán las encargadas de proveer del material necesario para la vacunación.
¿Cuánto nos costarán?
El proyecto de PGE para 2021 contempla una partida de 1.011 millones de euros para la compra de vacunas contra el coronavirus, aunque se podrían ampliar como gastos extraordinarios. La gran parte de ese dinero proviene de los fondos de reconstrucción y no todo se destinará a la compra de dosis, sino también a su conservación.
Según una estimaciones del precio, una dosis de la vacuna de Pfizer costaría 16,50 euros; la de AstraZeneca, 3 euros; la de Sanofi, 10 euros; y la de Janssen se vendería a precio de coste.
¿Vacuna obligatoria?
Por otro lado, aún no hay una postura estatal al respecto de si la protección contra el COVID-19 será obligatoria o no en todo el país. Salvador Illa lo descarta: "los expertos nos dice que no es recomendable decretar la obigatoriedad de la vacuna", aseguró esta semana en el Senado, apostando por "la verdad" para que la sociedad se comprometa a vacunarse.
Sin embargo, ayer el PP gallego se adelantó y llevó al Parlamento una proposición de ley por la que pretende multar a quienes se resistan a vacunarse o hacerse una PCR. De facto, esto haría obligatorio vacunarse en la comunidad.
Según el barómetro del CIS de noviembre, el 47% de los españoles no se pondría la vacuna de manera inmediata, frente al 36,8 % que sí lo haría. Los indecisos a vacunarse aumentan en tres puntos con respecto al barómetro de octubre, a pesar de que la encuesta se hizo durante los días en que Pfizer publicó unos primeros resultados muy esperanzadores sobre la efectividad de su compuesto.
La vacuna española
España también se sumó a la carrera para conseguir una vacuna efectiva. Sin embargo, los recortes en ciencia en la última década y la falta de competitividad en el sector investigador han lastrado posibles avances en el desarrollo de un remedio contra el coronavirus de marca España.
Algunos de los estudios más avanzados, aunque todavía en situación pre-clínica, son los dirigidos en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) por Mariano Esteban y Juan García Arriaza, basada en una vacuna de la viruela; la del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas, de Vicente Larraga, que utiliza un gen antígeno del coronavirus; o el de Luis Enjuanes e Isabel Sola, también en el CSIC, que crea un virus sintético para generar la inmunidad.
España sí forma parte de un estudio en Fase III de la vacuna con el proyecto de Janssen, que comenzará a reclutar voluntarios en ocho hospitales españoles para estudiar la efectividad de su vacuna a partir de diciembre y que ya ha sido aprobado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.