Especialmente dramática es la situación en la ciudad de Passau, en Baviera, donde se espera que los ríos Inn y Danubio superen hoy los máximos niveles históricos registrados en 1954. Esta crecida hizo que el pasado del fin de semana el centro histórico de la ciudad se viera anegado por las aguas, y al menos una persona falleció en Baviera.
El gobierno bávaro ha activado la alarma después de que ayer se registraran niveles de 9,2 metros en el Inn y de hasta doce metros en el Danubio.
La situación es asimismo crítica en algunas regiones del estado de Turingia, en el este, donde desde la pasada madrugada los soldados participan junto a voluntarios de protección civil en el reforzamiento de diques y márgenes de los ríos con sacos de arenas.
Por otro lado, dos personas han muerto y otras tres están desaparecidas en la República Checa debido a las fuertes lluvias caídas, que causaron inundaciones y desprendimientos de tierra en varias regiones del país y llevaron al país a la declaración del estado de emergencia.
Solo en Praga se desplegarán unos 300 efectivos de las fuerzas armadas, mientras que otros 2.000 soldados ayudarán a retirar los escombros en numerosas partes del país.
En Praga se derrumbó una casa utilizada como segunda residencia a consecuencia del agua que afectó a sus cimientos, suceso en el que murieron una mujer y un hombre.