Lo consideró una broma pero ahora podría salirle muy cara a este joven youtuber ya que le pueden acusar de un delito de odio por humillar a una persona sin hogar. Le regaló 20 euros y un paquete de galletas rellenas de pasta de dientes provocándole un fuerte malestar y náuseas. La Guardia Urbana se puso en contacto con él para que denunciara.

Las autoridades judiciales investigan si se debería de abrir una causa penal: "Podría ser un delito contra la integridad moral y un delito de odio" explica Amadeu Becasens, comisionado de seguridad de la Guardia Urbana.

De ser así, el Ayuntamiento ha anunciado que se personará como acusación. Como no es la primera vez que se producen tratos denigrantes de este tipo van a poner en marcha un protocolo que proteja las personas que viven en la calle: "Les vamos a dar toda la información para que puedan defenderse, darles protección penal" dice Jaume Asens, teniente alcalde de Barcelona. A pesar de que el joven ya se ha disculpado con otro vídeo, la fiscalía investiga también si se cometió un delito de odio.