Sergio Morate sale de su piso abucheado e increpado por una multitud al grito de "asesino". La impotencia ante la situación es tal que la furgoneta en la que viajaba ha sido golpeada en repetinas ocasiones.

La hermana de Laura, una de las chicas asesinadas, no ha querido esconder su rabia. "A mi hermana la ha matado sin culpa de nada", grita furiosa.

Tampoco ha podido esconder sus lágrimas la hermana de Marina. Junto a ellas, familiares, vecinos y amigos han estado todo el día esperando la salida de Sergio Morate del piso en el que podría haberse cometido el crimen que acabó con la vida de ambas jóvenes.

En total, cerca de cinco horas ha durado el registro, en el que, por orden del juez, ha estado presente Morate por primera vez. También ha acudido a la operación la policía científica.

Morate ha llegado a su vivienda tras haber pasado más de dos horas en los juzgados de Cuenca, lugar donde ha sido trasladado desde la cárcel de Estremera.

En dicho centro penitenciario lleva ingresado desde el 6 de septiembre: es el principal sospechoso de la muerte de su exnovia Marina y de su amiga Laura el pasado mes de agosto.

Morate fue detenido en Rumanía dos días después de hallarse los cuerpos de las jóvenes asesinadas. Un mes después del trágico suceso, fue extraditado a España e ingresó en la cárcel.