El hombre que confesó haber apuñalado a cinco personas en Lleida ha pasado a disposición judicial. Los Mossos le acusan de cinco tentativas de homicidio con agravante de xenofobia, porque hallaron libros y pintadas de ideología fascista en su casa. En su declaración aseguró que, tras las agresiones, vagó por el campo hasta que cogió un taxi y se entregó al primer policía que vio. Dice que apuñaló a sus víctimas porque, agobiado por los estudios, no encontraba salida a su vida.
El apuñalador de Lleida asegura que se entregó al primer policía que vio