Se deshizo de ellas en un lugar situado a tres kilómetros del pueblo conquense de Palomera. Marina y Laura murieron violentamente, la autopsia lo confirma.

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha lo confirma en una nota: "Se puede establecer el carácter violento y de origen homicida que provocaron ambos fallecimientos".

El principal sospechoso, Sergio Morate, era el ex novio de Marina. Presuntamente, Sergio la estranguló con unas bridas según publican algunos medios. A Laura, su amiga, la habría estrangulado tras golpearla brutalmente. Ninguna parece presentar heridas de arma blanca ni de arma de fuego. Le bastaron sus manos para quitarles la vida.

El Director General de la Policía, Ignacio Cosidó, asegura que "las muertes pueden haber sido violentas y con algunos daños".

En los registros, la Policía no halló signos de violencia en el piso en el que había convivido Marina y el sospechoso. Por eso se desconoce si el jueves 6 las trasladó con vida o no en este Seat Ibiza. Lo que sí parece claro es que fue premeditado y que no contaba con la presencia de Laura.

El criminólogo, José Luis Cervero explica que "había comprado la cal viva, y eso muestra la premeditación, porque ya tenía las bridas preparadas, lo tenía todo". Queda por esclarecer si el crimen fue llevado a cabo por el sospechoso o alguien más le ayudó.

Jesús Garzón, Criminólogo Universidad Camilo José Cela afirma que "Para trasladar los cuerpos desde donde se comete el crimen hasta donde se entierran, para intentar hacer desaparecer los cuerpos,  y para dehacer todas esas pruebas que le pudieran incriminar de alguna manera, sí se entiende que pudiera haber participado por lo menos otra persona".

Los resultados de los análisis forenses se harán públicos cuando se levante el secreto de sumario.