Según ha informado la policía catalana, recibieron la alerta de la Policía Local de que un joven que practicaba esnórquel había visto, junto a unas rocas, a unos 5 metros distancia de la playa y a poca profundidad, restos que parecían varios cráneos humanos y un fémur.

Los agentes de la Unidad Acuática de los Mossos, con base en Sabadell, han inspeccionado el lugar indicado por el joven y finalmente han dado con ocho cráneos, algunos incompletos, fémures y otros restos, semienterrados.

La policía ha sacado los restos del agua y en cuanto la comitiva judicial ha hecho el levantamiento los han trasladado en bolsas hasta el Instituto de Medicina Legal de Girona, donde los forenses los analizarán.

Los encargados de aportar luz sobre este hallazgo son los agentes de la Unidad de Investigación del Área Básica Policial de Roses, que han puesto el caso a manos del Juzgado de Instrucción de guardia de Figueres.

La alcaldesa de Roses, Montserrat Mindan, se ha mostrado sorprendida por el lugar de la aparición de estos restos, que estaban a la vista desde fuera del agua, porqué según ella "en verano es una zona muy transitada".