Las menores eran captadas a través de compañeras de colegio, en discotecas o por internet, aprovechándose de los anuncios que ponían las propias chicas buscando trabajo como camareras, para el cuidado de ancianos o niños, o para tareas de limpieza.

Los detenidos entraban en contacto con ellas y las convencían para que comenzaran a trabajar de masajistas.

Durante la investigación, han sido identificadas cuatro menores españolas y ocho extranjeras, se han llevado a cabo tres registros domiciliarios y dos inspecciones en locales públicos, al tiempo que se han intervenido dos vehículos y numerosa documentación relacionada con los hechos investigados.

La investigación, que ha llevado a la detención de los tres responsables de este grupo, ha sido desarrollada en una operación conjunta del grupo de menores de la brigada provincial de policía judicial, y de la unidad contra las redes de inmigración y falsedad.