La probabilidad de que aumente la bolsa de la exclusión social en España, a pesar del crecimiento económico, es "tremendamente elevada", según Cáritas. Esta es una de las conclusiones del informe "Análisis y perspectivas 2016" de la Fundación de Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada (Foessa), titulado "Expulsión social y recuperación económica", que se ha presentado en Madrid.
Guillermo Fernández, miembro del comité técnico de la fundación de Cáritas, ha explicado que "en periodos de recesión económica, la pobreza aumenta rápidamente, pero cuando crece la economía, no desciende de la misma manera e, incluso, permanece estancada".
La directora de Comunicación, Sensibilización e Incidencia de Cáritas, Natalia Peiro, ha estimado que esta situación se está haciendo "invisible para gran parte de la sociedad" y ha expresado su preocupación por el ensanchamiento de la "fractura social" después de la crisis.
El análisis territorial de la desigualdad, la pobreza y el desempleo muestra una España a dos velocidades y refleja que, como consecuencia de la crisis, se ha generado un proceso de divergencia entre las comunidades autónomas. La investigación revela que las diferencias en el eje norte-sur del país no sólo se mantienen, sino que tienden a aumentar.
Así, las regiones del sur, Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana, Canarias y las Islas Baleares se encontrarían "en peor situación" ante una eventual salida de la crisis. Cantabria, el País Vasco, Navarra, La Rioja y Aragón, las autonomías del norte, estarían "en mejor situación" desde el punto de vista de la pobreza, la desigualdad y el desempleo más grave.