La última del hombre apuñalado en Lleida fue un ciudadano de origen pakistaní. El agresor clavó un cuchillo sobre su espalda, la misma arma con la que instantes antes había apuñalado a cuatro personas. Un testigo afirma que al ver al hombre con un cuchillo en la espalda llamó a los servicios de emergencias. 

La ciudad se encuentra blindada y los accesos totalmente controlados. Según explica Ángel Ros, alcalde de Lleida, hay "un dispositivo de búsqueda en toda la ciudad intensificado en lugares próximos a los que se produjeron las agresiones".

El agresor sigue en paradero desconocido. Lo único que une a las víctimas es que se encontraban en la calle. El ministerio del Interior, afirma que podría tratarse de un perturbado. 

Durante media hora, el agresor logró sembrar el caos en el barrio de Pardiñes. De momento, las víctimas mejoran y el herido más grave ya se encuentra en estado estable.