Agentes de la Unidad Central Operativa (UCO), junto a personal del servicio de Criminalística de la Guardia Civil y en colaboración con la Comandancia de Badajoz, han registrado este jueves la casa de Manuela Chavero, la mujer que desapareció en la madrugada del 4 al 5 de julio de 2016 en la localidad de Monesterio (Badajoz).
Según fuentes de la investigación, cuatro años después de su desaparición, la Guardia Civil rastrea de nuevo la vivienda y la zona con el objetivo de encontrar nuevas pruebas sobre el paradero de Chavero, en unas pesquisas que no ha abandonado.
En declaraciones a Europa Press, fuentes de la UCO han explicado que "no hay novedades" y que "simplemente" se ha llevado a cabo en el domicilio de Manuela donde desapareció "una serie de gestiones que estaban pendientes por hacer".
"Una inspección también nueva pero nada precipitado por ningún hecho concreto", han indicado las mismas fuentes, que han resaltado que "estaban pendientes de llevarse a cabo" y se han hecho "cuando se han podido hacer en coordinación con los juzgados que lleva el tema".
Las pesquisas continúan
Del mismo modo, han agregado que, en función de los resultados de dichas gestiones, podría llevar "nuevas actuaciones", pero que "no hay previsto" este jueves ningún rastreo en el monte "ni nada por el estilo".
Finalmente y sobre la investigación en torno a la desaparición de Chavero, la UCO ha resaltado que "no ha cesado" y que siguen trabajando en la misma "con mucho interés", en relación a lo cual ha confiado en su pronta resolución y que "acabará saliendo" y ha abundado en que "ahí está la UCO dándolo todo", aunque "hay veces que se cruzan las cosas".
Manuela Chavero tiene dos hijos, quienes en el momento de su desaparición se encontraban con su expareja. La mujer no se llevó llaves, ni documentación, ni el teléfono móvil, y la televisión y la luz de la casa estaban encendidas.
Desde su desaparición, la localidad ha recordado todos los años a su vecina con distintos actos mientras que la investigación se ha mantenido, durante este tiempo se han barajado todo tipo de hipótesis sobre su desaparición, pero nada que explique lo que ocurrió.
El pasado mes de junio,la UCO tomó declaración de manera formal a un videnteque decía tener pistas del paradero de Manuela. Según explicó la hermana de Manuela, Emilia, en Expediente Marlasca, "este señor es de Chiclana y me asegura en un 100% que conoce el sitio donde está Manuela. Fallecida, claro está. Es un chico que se dedica al tema de la videncia y ha trabajado con un grupo de compañeros de otros países".
Según la hermana de Manuela, este vidente no ha pedido dinero y tan sólo ha solicitado que la UCO le acompañe al lugar en el que él sostiene que se encuentra el cuerpo. "Afirma que está enterrada bajo dos metros y medio de tierra", no obstante, de momento la UCO no tiene intención de buscar en esa localización.