Cartel preparado y al escaparate porque Sara este 8 de marzo cierra su peluquería: "Algo tenemos que hacer porque si nos quedamos paradas volvemos para atrás como nuestras madres y abuelas".
Carmen también ha decidido echar el cierre y su marido Paco está a favor: "Sé lo que sufren mis hermanas por el mundo en el que estamos ahora mismo". En el restaurante que llevan Alberto y Mar en Valencia también apoyan la huelga y cierran: "Decidimos cerrar todo el día y hacer huelga activa".
Hugo, dueño de una cafetería, cambia de labor este 8M: "Los chicos que trabajamos aquí lo dedicaremos a cuidar a nuestros hijos". Su inspiración fue una mujer de sólo cinco añitos, su hija: "Le dijimos que su mamá iba a hacer huelga y nos preguntó que si ella, siendo mujer, también podía hacerla".
Natividad, que conduce un taxi desde hace 13 años, también parará y la tienda de zapatos de Eva ya luce un cartel avisando del cierre: "Cerramos por las mujeres que no van a poder".
Tienen miedo a represalias
Los repartidores de Barcelona denuncian la precariedad laboral que sufren: jornadas interminables, sin descansos...
El contexto Los repartidores están en una situación límite dada su precaria jornada laboral donde tienen miedo a represalias por denunciar las condiciones en las que trabajan.