La concejal de Protección y Movilidad en el Ayuntamiento de Granada, Raquel Ruz (PSOE), ha vinculado los botellones que se han registrado en la localidad de Churriana con el cierre del 'botellódromo' en la capital, el cual tenía un 'efecto llamada'.

La edil ha opinado a preguntas de los periodistas que el cierre del recinto de Arabial ha trasladado el problema a los pueblos del cinturón de donde proceden estos jóvenes, después de que este pasado sábado miles de personas celebraran un botellón en Churriana que se ha saldado con varios detenidos y otros tantos atendidos por los servicios sanitarios.

Sobre la queja que han realizado los sindicatos policiales, la edil ha explicado que el Ayuntamiento de Granada envió a dos agentes a la localidad en el marco de los convenios institucionales que existen entre la capital y los pueblos del área metropolitana donde el número de agentes es menor y con los que se seguirá colaborando.

Sobre las fiestas en el barrio del Zaidín, la edil ha destacado la normalidad con la que se desarrollaron los conciertos del Zaidín Rock y las escasas incidencias registradas, con un total de seis intervenciones frente a las 21 del pasado año y sin que en ellan consten 'riñas' o coma etílicos.

Ha precisado que solo se registraron aglomeraciones de jóvenes a las puertas de los conciertos que no podían acceder con la bebida y por tanto la tenían que consumir antes de entrar, pero no ha sido la "tónica general ni ha causado problemas a los vecinos". En el resto de la ciudad hubo "normalidad absoluta", según ha confirmado la edil, para quien estas fiestas se han desarrollado con "más tranquilidad" que otros años.