Mayo de 2008, primer programa de 'Caiga quien caiga' en laSexta. La reportera Estíbaliz Gabilondo busca a Esperanza Aguirre, pero se encuentra con un obstáculo inesperado: el joven Francisco Nicolás. 

"Perdona, ¿puedes dejar de empujarme?", le pedía la reportera. "Hay un chico jovencísimo que se ha afiliado a esto de la seguridad", decía la periodista. Y tan joven, tenía 14 años recién cumplidos y ya buscaba la sombra de los poderosos.

Tres años más tarde, Nicolás llega a lo más alto: concretamente al balcón de la primera planta de la sede del PP. Según informa 'Interviú', Nicolás fue uno de los invitados de excepción de la noche electoral. En una foto que realizó el propio joven en la sede del PP se ve a Rajoy y su séquito salir del balcón más famoso de la calle Génova. En otra foto, que distribuyó a sus amigos, Nicolás aseguraba que era él quien saludaba desde la sede popular.

A partir de esta noche, llegó el apogeo de Nicolás: se introdujo en FAES de la mano de su madre y se codeó con Aznar. Ingresó en la elitista universidad privada Cunef, y allí circuló un rumor, Nicolás era hijo bastardo de Juan Carlos I. Esto llegó a oídos del CNI y abrió la operación Fileas.

Las investigaciones confirmaron que Nicolás no era hijo del rey pero sí que tenía una impresionante capacidad para cerrar negocios. Según 'Interviú', Nicolás se reunió con el mismísimo Jordi Pujol en Barcelona, y mantuvo contactos con CEMEX para librarla de una multa. 

Pero la caída en desgracia de Nicolás llegó tras mantener contactos con el exministro de exteriores Moratinos. Quería su mediación para obtener un aval de 20 millones de euros de un banco de Guinea.

El ocaso de Nicolás llegó hace 2 semanas, cuando 12 agentes de servicios internos de la Policía Nacional detuvieron a Nicolás ante un presunto delito de estafa que ahora, el propio afectado, niega que se haya producido. 

Son cada vez más los interrogantes que rodean a un joven de 20 años que se ha codeado con los más poderosos.