Madres y padres del colegio Villar Palasí de Velez-Málaga se han manifestado en el ayuntamiento de la localidad tras el cierre del centro educativo por las grietas del edificio. Los manifestantes han protagonizado momentos de tensión tras reclamar soluciones.
Los alumnos han sido repartidos en otros centros, algunos a varios kilómetros del Villar Palasí. "De la noche a la mañana nos hemos enterado por redes sociales... al final los que lo pagan son los niños", ha denunciado una madre.
Desde la consejería de Educación de la Junta de Andalucía aluden a que las grietas han aumentado y ya no es un lugar seguro, aunque los afectados aseguran que los desperfectos llevan allí casi 10 años.
Por este motivo, piden una mejor organización y que se les informe, ya que en torno a 600 niños han sido reubicados de un día para otro en otros centros. Para algunas familias es imposible llevarles.
De hecho, algunos denuncian que tienen a cada hijo en un centro diferente. "Yo tengo que llevar a mi hija en autobús y al otro, a la otra punta. No puedo, es imposible", ha aseverado una de las afectadas. Además, tampoco saben si mantendrán el comedor, el autobús o cuanto tiempo estarán en esta situación.
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El delegado de educación y el centro se han reunido esta tarde para buscar soluciones a una situación que las familias califican de insostenible.
Una noche aguantando el aliento
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En Vélez-Málaga la corriente también se ha abierto paso entre sus calles. Allí ha habido zonas en las que los vecinos se quedaron atrapados, ya que "de buenas a primeras entró el agua para dentro".