Diecinueve ciudadanos franceses que habían cruzado la frontera, pese a las restricciones por la pandemia, para acudir a un prostíbulo ubicado en un hotel de la comarca gerundense del Alt Empordà han sido identificados en el marco de un operativo policial contra la trata de seres humanos.
Según informa la Policía Nacional, a todas esas personas se les han levantado actas de denuncia por incumplimiento de la normativa COVID-19, al igual que a los responsables del local.
En total, se ha identificado a 39 clientes que se encontraban en el interior del establecimiento, así como a 21 mujeres, con las que se mantuvo una entrevista reservada para detectar casos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual.
El operativo conjunto entre la Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra se ha desarrollado a raíz de una información que apuntaba que se ejercía la prostitución en un establecimiento hotelero del Alt Empordà, donde se incumplían además las restricciones por la pandemia, aunque de forma discreta para no levantar sospechas.
El pasado 30 de enero, los agentes llevaron a cabo la inspección del local, en el que participaron desde la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras a la Unidad de Extranjería y Documentación de La Jonquera.
Los Mossos contaron también con unidades de esta última localidad fronteriza y administrativas y se recibió apoyo de agentes de ambos cuerpos especializados en orden público para dar seguridad al dispositivo ante el volumen de clientes presentes en el establecimiento.
Forzada a alquilar su vientre
Le quitan el bebé a una mujer a la que le implantaron un embrión de otra pareja por error: Kyrstena 'tuvo' un bebé negro de un donante blanco
¿Qué pasó? Kyrstena Murray se sometió a un tratamiento de fertilidad con un donante anónimo, pero al dar a luz, el bebé era negro, cuando ella había pedido un donante blanco. Las pruebas de ADN revelaron la negligencia: la clínica le había implantado el embrión de otra pareja.