El grupo estaba compuesto por cuatro hombres y una mujer, que se encargaba de recoger el dinero que ganaban las víctimas y hacerlo llegar hasta uno de los integrantes, que gestionaba la recaudación y que era el que más víctimas tenía a su cargo.

A las mujeres las exhibían en la zona centro de Madrid, en la calle Montera y la Plaza Santo Domingo, y en las afueras, en el polígono de Villaverde.

Las investigaciones comenzaron en Torrevieja, Alicante, el pasado mes de febrero y se comprobó que se trataba de un grupo criminal "perfectamente organizado", que captaba a sus víctimas en Rumanía y las trasladaba a España, donde las obligaba a prostituirse en clubes, pisos, hoteles y en la calle.

Los presuntos autores se encargaban de captar a los clientes y organizar las citas, tras lo que obligaban a las víctimas, incluso empleando violencia y amenazas si era necesario, a reunirse con los clientes y prostituirse. Todo el dinero que ganaban era recaudado por la banda.

El pasado 14 de julio se inspeccionaron cuatro domicilios, en los que localizaron a los cinco detenidos y a seis víctimas y en los que se intervinieron varios teléfonos móviles, publicidad de servicios sexuales, una agenda con números telefónicos y envoltorios de sustancias estupefacientes.

En total, se ha detenido a cuatro hombres y una mujer, todos de nacionalidad rumana, y se ha procedido a la protección de las víctimas, una de las cuales es de nacionalidad española, con la colaboración de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituta.