Jacob Hall, un niño de 6 años, falleció tras recibir varios disparos que realizó un adolescente de 14 años en la escuela de primaria de Townville. EL pequeño estuvo varios días en el hospital pero finalmente falleció. El tiroteo, en Carolina del Sur, se saldó con varias víctimas que, afortunadamente, se encuentran fuera de peligro recuperándose.
Reane Hall, madre de Jacob, explicó que siempre quería ayudar a los demás y salvar a la gente del peligro, por ello la familia del niño quiso darle una despedida especial, con todos los detalles que le hubieran gustado: un funeral diferente en el que todos asistirían vestidos de superhéroes. A Jacob le disfrazaron de Batman en una pequeña fiesta de disfraces a la que asistieron más de 1500 personas contando niños y adultos.
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También asistieron Nikki Haley, gobernador, y el senador estadounidense Tim Scott para despedir de una forma diferente a Jacob. Una fiesta basada en superhéroes de comics donde los globos y máscaras de personajes como las Tortugas NInja, Spiderman o Wonderwoman fueron los protagonistas. Asimismo la familia del niño lució con camisetas de "Team Jacob".
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Tienen miedo a represalias
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