Las autoridades austríacas han descubierto a unos 200 solicitantes de asilo y han detenido a cinco presuntos traficantes de personas en el marco de la nueva operación en las fronteras del país, según ha revelado un responsable del Ministerio del Interior.

El director general de Seguridad Pública del Ministerio, Konrad Kogler, ha informado de que "en las horas desde que comenzamos a aplicar estas medidas que hemos acordado con Alemania, Hungría y Eslovaquia, hemos sido capaces de localizar a más de 200 refugiados en tales vehículos y hemos detenido a cinco traficantes".

La ministra del Interior, Johanna Mikl-Leitner, ha aclarado en el mismo acto que los controles que se están realizando en la frontera de Austria no son los clásicos controles fronterizos. "No estamos violando Schengen", ha asegurado.

Previamente, la ministra había anunciado un endurecimiento de los controles en la frontera este, después de que 71 refugiados fueran hallados muertos en el interior de un camión abandonado. "Realizaremos controles durante un periodo indeterminado de tiempo en todos los pasos fronterizos importantes en la región este, registrando todos los vehículos en los que hay espacios posibles para esconder a personas traficadas", había declarado a la emisora ORF.

La medida ya está teniendo consecuencias en Hungría. La autovía que lleva hacia Austria presentaba a primera hora de esta mañana 20 kilómetros de retenciones, según ha informado la agencia nacional de noticias MTI.

En los últimos tres días, la Policía ha detenido a 8.792 inmigrantes y solicitantes de asilo al cruzar hacia Hungría, la mayoría de ellos llegados desde Serbia. La Policía húngara informó el domingo de que se ha detenido a un quinto sospechoso en relación con la muerte de los 71 refugiados en un camión en Austria.