La Policía de Manchester ha podido identificar y detener a George Roberts, de 35 años, gracias a que éste escribió las iniciales de su nombre con su propia sangre en la pared de una casa en la que entró a robar.

El detenido, que sustrajo dinero en efectivo y varios objetos valorados en 690 euros, en un principio aseguró que estuvo en esa casa porque le invitaron a una fiesta, pero finalmente reconoció que entró a robar por la fuerza, ya que estaba bajo los efectos del alcohol y las drogas.