Los vecinos luchan contra el fuego. Tuvieron que salir en plena madrugada porque las llamas estaban a punto de alcanzar sus casas. Desesperados y solos intentaron detener el fuego con mangueras escobas y cubos de agua hasta que llegaron los bomberos.

Una noche infernal que ha dejado fuera de sus casas a 47 vecinos. Tuvieron que ser desalojados porque el humo se coló en muchas viviendas. El peligro de momento para ellos ya ha pasado pero el monte contúna ardiendo. Hasta la zona se ha desplazado la unidad militar de emergencia.

El fuego ya ha calcinado alrededor de 250 hectáreas y tanto los medios aéreos como los terrestres siguen trabajando sin descanso.

Un fuego que además sospechan que podría ser intencionado. Y no es el único en la comunidad. Otros dos incendios en A fonsagrada y Toén también continuan activos.