Alrededor de cuatro mil personas han presenciado la celebración del toro jubilo en Medinaceli, un festejo en el que los antitaurinos han gritado de nuevo por su abolición rodeados de fuertes medidas de seguridad, con presencia generosa de fuerzas de orden público. Unas medidas que llegan tras los incidentes registrados el año pasado en los que medio centenar de antitaurinos, llegados de varios puntos de España, protestaron ante el pueblo.

Este año ha vuelto a registrarse mucho movimiento en las redes sociales y finalmente los antitaurinos han acudido a la plaza Mayor de esta localidad, pero las fuerzas policiales han les han impedido el acceso al improvisado albero.