Velas, flores y un recital de poesía. De esta manera han querido rendir homenaje las familias y los amigos de las cinco jóvenes, de entre 17 y 20 años, que murieron hace un año en un tapón humano en uno de los vomitorios del pabellón municipal Madrid Arena durante una macrofiesta la noche de Halloween.

Desafiando a las bajas temperaturas, centenares de personas se reunían al filo de la medianoche a las puertas del Arena, en una vigilia organizada por Isabel de la Fuente, madre de Cristina Arce, una de las víctimas, para rendir homenaje a las cinco chicas y exigir justicia.

"Justicia por cinco personas inocentes que murieron aquí hace un año por la avaricia de unas personas y por la desidia de otras. Justicia por cinco personas que vinieron aquí a disfrutar de una noche de fiesta y fueron aplastadas hasta la muerte por la negligencia, por el dinero, por los favores", decía con voz firme en su intervención la madre de Cristina Arce.

En opinión de la madre de Cristina, Madrid, Espacios y Congresos, empresa del Ayuntamiento de Madrid, nunca debió alquilar el pabellón al responsable de la empresa Diviertt, Miguel Ángel Flores.

"Si alguien quiere hacernos creer que lo ocurrido aquí hace un año fue un accidente inevitable, se ha equivocado. Eso no es lo que pasó. Lo que pasó es que alguien accedió al alquiler del edificio municipal con deudas a la Seguridad Social y a Hacienda, contraviniendo la ley de contratación para las Administraciones Públicas".