Un niño de cuatro años ha fallecido en el caserío Basabe, situado en Azpeitia, Guipúzcoa. El cuerpo sin vida del menor fue encontrado en la bañera y presentaba síntomas de ahogamiento.
Las primeras investigaciones de la Ertzaintza apuntan a que el pequeño fue víctima de un homicidio. La madre habría acabado con la vida de su hijo tras haber sufrido un brote de enajenación.
La mujer tuvo que ser trasladada al Hospital de Donostia tras autolesionarse. Ahora, se espera a los resultados de la autopsia del niño para esclarecer las circunstancias en las que ha ocurrido el fallecimiento.