Mauricio García-Pereira tiene 47 años y lleva desde 2009 trabajando en el matadero francés de Limoges, contra el que ha empezado una batalla por la crueldad con la que tratan a los animales.
Ha denunciado la situación en 'Le Monde', donde ha confesado que "todos los días, al menos, 50 veces por semana, matamos a vacas preñadas. Vemos pasar el útero hacia la basura. ¿Cómo se puede matar a los terneros? Esto es abominable".
Mauricio, indignado por la situación, contactó con la protectora 'L214', que ha difundido un vídeo para denunciar lo que ocurre en Limages. En el mencionado matadero se cometen auténticas barbaridades, desde someter a los animales a descargas eléctricas hasta asfixiar a los fetos antes de tirarles a la basura.
Desde la asociación agradecen la valentía del trabajador por denunciar la situación, intentan concienciar a la gente sobre "el sufrimiento sin límites" de estos animales y piden "la prohibición de la matanza de vacas en estado de gestación".