Los cánticos machistas que se han llevado a cabo por algunos alumnos de Colegio Mayor Elías Ahuja han provocado todo tipo de reacciones entre los más jóvenes. Mientras algunas de las alumnas del Colegio Santa Mónica han defendido a sus vecinos asegurando que se trata de una tradición en tono de humor, excolegialas del mismo centro han reconocido que este tipo de vejaciones se llevan produciendo más de una décaday que las jóvenes tienden a normalizarlo.
La realidad es que esos gritos machistas ya se investigan como un posible delito de odio y que siguen provocando debate a las puertas de las universidades. laSexta ha salido a la calle para conocer cuál es la opinión de los más jóvenes respecto a este tipo de prácticas más allá de las jóvenes del Colegio Mayor al que se dirigían los insultos.
A pesar de que alguno de los entrevistados en Ciudad Universitaria ha defendido que es "una tradición", la gran mayoría coincide en condenar los hechos. Creen que "están totalmente fuera de lugar", e incluso "atrasados a los tiempos en los que estamos". Un extremo en el que coinciden la mayoría de los entrevistados.
"En España, con el rollo de que algo es tradición, perdonamos muchísimas cosas que no tenemos que perdonar. También era tradición tirar a los homosexuales de campanarios y no lo seguimos haciendo", han declarado otras dos jóvenes.
Además, las estudiantes coinciden en que las jóvenes a las que se dirigían los insultos pueden tener opiniones dispares según hayan sufrido situaciones similares en su vida. "A mí no me gustaría que me gritasen eso", han coincidido, demostrando que
Las razones
El inesperado giro de la investigación del kayakista desaparecido en agosto: fingió su muerte y huyó del país para cobrar un seguro de vida
El kayakista Ryan Borgwardt, desaparecido en agosto de este año, no estaba muerto. Según han descubierto los investigadores, el hombre había contratado un seguro de vida y decidió fingir su muerte para cobrarlo. Esta es la historia de película.