Con sabor a pera, kiwi, chicle, uva, futa de la pasión o efecto frío, las bolsitas sublabiales de nicotina sintética se venden en algunos establecimientos o en webs de vapeo. Triunfan en algunas redes sociales y, aunque no hace mucho que se pueden conseguir, no pocos jóvenes las conocen.

"Los jóvenes vienen a por ellas porque muchas veces están de fiesta y así evitan salir a fumar fuera. En el trabajo, lo mismo. No es molesto, te lo puedes poner y nadie sabe que lo estás usando", asegura el dependiente de una tienda de productos relacionados con las cachimbas.

Pero, a pesar de llevar poco en el mercado, ya encuentran varios detractores. Raquel Fernández, presidenta de Nofumadores.org exige que este producto, actualmente sin regulación en España, sea prohibido. "Si no se prohíbe, debería estar totalmente regulado y equiparado a los productos de tabaco, en cuanto a fiscalidad, promoción y venta. Quieren venderlo como para dejar de fumar, pero no deja de ser un producto que la industria del tabaco está intentando meter para continuar la adicción de las personas", asegura.

Por su parte, Paco Pascual, médico de la CNPT alerta de que "pueden provocar, sobre todo, enfermedades relacionadas con el corazón. Taquicardias, una cardiopatía grave, hipertensión arterial e incluso fomentar el cáncer".

Sanidad ya estudia este producto y asegura que su regulación quedará incluida en la próxima ley, que tendrá como base el Plan Integral de Prevención y control de tabaquismo, pendiente de aprobar.