El incendio declarado el pasado lunes en el término municipal de Bejís (Castellón) evoluciona favorablemente y ya no quedan llamas en la mayor parte del perímetro, que supera los 135 kilómetros y con casi 20.000 hectáreas afectadas por las llamas.

Según la última información facilitada a primera hora de la mañana por el 112 GVA, durante la noche se ha estado trabajando con "ataque directo" en el frente de la zona de Andilla, en barrancos de difícil acceso, donde si había llama.

Los técnicos de la compañía Iberdrola van a revisar este sábado que no hay riesgo por roturas en los tendidos eléctricos afectados. Durante la noche han trabajado sobre el terreno nueve unidades de Bomberos Forestales de la Generalitat, nueve autobombas, una brigada de voluntariado de Fuentes de Ayódar, ocho dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón, una unidad BRIF del Ministero de Transición Ecológica y 146 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias.

Este sábado se incorporan 12 medios aéreos de la Generalitat, 19 del MITECO, dos de Castilla La Mancha, tres de la Generalitat de Catalunya y otros tres el Gobierno de Aragón.

A última hora del viernes no se contemplaba que los vecinos desaojados de la zona pudieran volver a sus casas aunque a primera hora de este sábado se volverá a evaluar la situación para tomar decisiones al respecto.

El perímetro del incendio de la Vall d'Ebo sigue estabilizado

Por otra parte, el perímetro del incendio declarado hace una semana en la Vall d'Ebo (Alicante) sigue estabilizado y su evolución es favorable, según la información facilitada a primera hora por el 112 GVA. En esta jornada está prevista una nueva perimetración con cámara térmica de la unidad de drones.

El fuego se calcula que ha calcinado unas 12.150 hectáreas de terreno en 100 kilómetros de perímetro. El personal operativo en las tareas de extinción ha estado repartido durante la noche en dos sectores sin que se haya registrado novedades, según el 112 GVA.

El incendio, que había obligado a evacuar a unas 1.500 personas de numerosas poblaciones de Vall de Gallinera, Vall d'Alcalà, y municipios de la comarca del Comtat, quedó este viernes estabilizado a las 10.00 horas. Los vecinos afectados pudieron ir regresando a sus casas el jueves.