La Guardia Civil de Cantabria, en colaboración con la Consejería de Medio Rural, investiga sobre el terreno si los incendios forestales registrados en la comunidad autónoma, unos 50 registrados desde el pasado viernes, "son o no intencionados".

Según han explicado fuentes del Instituto Armado, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) intentan localizar pruebas en las zonas donde se han producido los incendios para conocer si estos han sido provocados y saber quién ha sido el autor.

Una vez se determine que los incendios han sido intencionados, la Guardia Civil abrirá diligencias con un presunto delito contra el medio ambiente, han recordado las mismas fuentes respecto al protocolo de actuación que se sigue siempre en este tipo de sucesos.

Anoche, los retenes que permanecen pendientes de las zonas donde se han producido los incendios, tuvieron que actuar en Miera, Luena y Campoo de Yuso, por la activación de algunos rescoldos, según informó el Gobierno regional.

El Ejecutivo precisó que estos pequeños focos no suponen, en principio, ningún riesgo para la población y permanecen bajo control, ya que se mantiene la vigilancia para evitar nuevos incendios forestales o la reactivación de sus restos.

Es relativamente frecuente, según la Dirección General de Medio Natural del Gobierno, que los incendios que se han producido en zonas de difícil acceso o con abundante materia vegetal permanezcan con restos que puede avivarse puntualmente por efecto del viento y aprovechando la sequedad del terreno.

Las condiciones climatológicas continúan en Cantabria similares a días anteriores, con altas temperaturas para la época -invierno- y viento sur.

El Gobierno de Cantabria pide mantener la alerta, recuerda que está prohibido cualquier tipo de quemas y solicita la colaboración ciudadana para evitar negligencias y proporcionar información que pueda ser de utilidad en la investigación de las causas de los incendios forestales.

El equipo humano de la comunidad autónoma que se ocupe de los focos, organizado por comarcas forestales y en turnos que cubren las 24 horas del día, está compuesto por casi 300 personas entre técnicos, emisoristas, y operarios de cuadrillas forestales.