Agentes de la Guardia Civil de Ceuta que operaban con cámaras térmicas detectaron a primera hora de la mañana de este miércoles la presencia de una pequeña embarcación propulsada a motor, que a pesar de las adversas condiciones para la navegación existente se dirigía desde la bahía de Bellionech (Marruecos) con rumbo a aguas territoriales españolas.
Ante la posibilidad de que pudiera tratarse de un intento de entrada irregular la Guardia Civil activó el protocolo establecido para dichas incidencias movilizando a patrullas terrestres y una embarcación del Servicio Marítimo hacia la zona a donde se dirigía la embarcación.
Debido al fuerte oleaje, la embarcación ocupada por los supuestos inmigrantes zozobró y estos cayeron al mar, en una zona de escaso calado y gran cantidad de rompientes que hacía muy complicado el acceso a la patrullera de la Guardia Civil.
Fueron los componentes de las patrullas terrestres desplazadas a la zona para atender la incidencia las que ese adentraron en el mar para auxiliar y socorrer a los inmigrantes dado el peligro que corrían sus vidas.
Una vez en tierra y a salvo, estas ocho personas fueron reconocidas por personal sanitario y entregadas al Cuerpo Nacional de Policía.
Cinco de los Guardias Civiles que intervinieron en el rescate tuvieron que ser atendidos en un Centro de Salud al presentar diversos traumatismos y problemas respiratorios.
El rescate fue llevado a cabo por componentes de Seguridad Ciudadana y del Servicio Marítimo de la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta con gran riesgo para la vida de los agentes.