Un monumento a los caídos preside el barrio del Ensanche de Pamplona recordando a miles de navarros la crueldad de una dictadura que reprimió y asesinó a sus abuelos y padres. Como el de Fermín. Él se cruza habitualmente con el edificio en el que fue enterrado con honores durante la dictadura el asesino de su padre, el general Mola.

Juan, el padre de Fermín que fue detenido en Corella y fusilado en las Bardenas. "Mi padre era amigo del alcalde y el 18 de julio iba a comprar churros a mi madre y a mi hermano y lo detuvieron y metieron en la cárcel", cuenta a laSexta con un hilo de voz.

Fermín recuerda perfectamente el momento en el que su padre comunicó a su madre que le iban a matar. "Mi padre le hizo un gesto a mi madre diciendo que le iban a matar y entonces se quitó el anillo de boda y se lo dio a mi madre", relata. A los cinco meses de ser asesinado, la madre de Fermín dio a luz a otra hija. Años después, la dictadura enterró con honores en ese monumento del centro de Pamplona al general Mola.

Hace unos años y por orden del Ayuntamiento, su cuerpo y el de Sanjurjo fueron exhumados. Aun así, no hay ninguna placa que explique el origen de este edificio, manchado por el dictador y sus secuaces. LaSexta Columna analiza este viernes los homenajes a los lugartenientes de Franco.