El británico Karl Martin compró un par de vasos de cerámica por cuatro libras en un mercadillo para poder guardar los cepillos de dientes. Cinco años después ha descubierto que tienen más de 4.000 años de antigüedad. Los frascos han resultado ser un antiguo objeto de la civilización Harappan del Valle del Indo, que vivieron durante la Edad del Bronce.
"Lo usé en el baño para guardar mi pasta y mi cepillo de dientes; incluso se manchó con un poco de pasta. Cuando los compré sospeché que podían ser antiguos, pero no creí que tanto y se me olvidó", ha declarado Martin para un comunicado de la empresa de subastas Hansons.
El británico cuenta que un día, mientras ayudaba a James Brenchley, un experto en antigüedades, a descargar una camioneta vio unos objetos de cerámica parecidos a su vaso. La pintura y las figuras de animales eran similares, así que decidió llevárselo a Brenchley.
El experto los identificó como artefactos del Valle del Indo y detalló que provienen de lo que hoy es Afganistán, solo que alrededor de 1.900 a.C. Esta civilización fue una de las primeras junto con Egipto y Mesopotamia.
Los historiadores y arqueólogos han estudiado exhaustivamente esta civilización gracias a que muchas de sus ruinas se han conservado en muy buenas condiciones a lo largo de los siglos. Lo que es todo un misterio es cómo tal objeto acabó en un mercadillo de Derbyshire, lugar donde Martin lo adquirió.