Tras siete días de paros por parte de los servicios de recogidas de residuos en la ciudad de Sevilla, la situación empieza a ser insostenible. Unas 4.500 toneladas de basuras se encuentran tiradas en las calles de la ciudad, dejando un olor muy desagradable para todos los vecinos.

La medida que ha tomado el alcalde de Sevilla ante esta situación es el no cobrar a ningún vecino de la ciudad la tasa de basuras hasta que la huelga de recogida de residuos no finalice.

El propio alcalde, Juan Ignacio Zoido, ha pedido a todos los ciudadanos sensatez y responsabilidad en estos momentos, ya que hay firmado un acuerdo con los trabajadores de la limpieza. Aunque los propios trabajadores dicen que el acuerdo del que habla el alcalde no implicaba tocar sus nóminas, principal motivo de estas protestas.

Otro sector afectado es el de los comerciantes, que se sienten totalmente incomodos al tirar todos los días grandes cantidades de basuras encima de residuos de días anteriores. Además, los malos olores que desprende la basura son un inconveniente para su negocio.

Por motivo de esta huelga, esta noche han ardido una treintena de contenedores en 25 calles distintas de la ciudad, la mayoría situadas en la zona sur. Se espera que a lo largo de esta semana se llegue a un acuerdo que ponga fin a esta situación tan insoportable para los vecinos de Sevilla.