Unos 25 inmigrantes de origen subsahariano permanecen encaramados en la parte alta de la valla de Melilla. Forman parte de un grupo que ha protagonizado un nuevo intento de entrada a la ciudad autónoma.

Los inmigrantes están en la zona de Aguadú, la parte más al norte del perímetro de Melilla. Dos de ellos están subidos en una farola, ya en territorio español, y a ambos lados del perímetro, tanto en la parte española como en la marroquí.

Uno de los jóvenes apenas conseguía agarrarse a la valla y ha estado a punto de dejarse caer. Sufría una lipotimia, además del agotamiento habitual de quienes saltan de la frontera. Un agente ha acudido con una escalera para bajarlo de allí, con la ayuda de varios inmigrantes. Cuando lo han conseguido, le han trasladado al hospital comarcal. Tenía varias heridas en la piel.

Melilla vive una extrema presión migratoria que mantiene en alerta constante a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.