Josefina, la mujer condenada a prisión por construir su vivienda hace 23 años es un espacio protegido de Fuerteventura y negarse a derribar su casa, está de camino a la cárcel.

Se despide de su casa y de los dos hijos y tres nietos que tiene a su cargo. Además, enferma de diabetes y en huelga de hambre ha pasado el fin de semana en el hospital debido a su delicado estado de salud, pero ahora, va camino del ferry que le trasladará a Lanzarote para ingresar en prisión.

Canarias ha pedido su indulto para evitar su condena de seis meses, pero el Gobierno central sigue sin pronunciarse. A pesar de la difícil situación, Josefa prefiere ingresar en prisión que dejar en la calle a su familia.