El joven de 19 años que, supuestamente, vivía desde hace dos secuestrado por su propio padre en la vivienda que este posee en Rivas Vaciamadrid, Madrid, tenía, en realidad, llaves con las que abandonar la vivienda si pasaba algo. Además, ofreció un testimonio contradictorio a los investigadores, lo que sumado a otras pesquisas ha hecho que el padre haya sido puesto en libertad con cargos.
La titular del Juzgado de Instrucción número Tres de Arganda del Rey decretó la libertad del acusado, quien sigue estando imputado por ese presunto delito y debe acudir dos veces al mes al juzgado.
En su declaración, el joven ofreció un testimonio contradictorio al asegurar que su padre cerraba la puerta de la vivienda cuando salía de esta, pero dejaba llaves dentro por si ocurría algo. Además, se sabe que el chico se fue a vivir con su madre y hermanas a una casa de acogida durante un tiempo pero, posteriormente, decidió regresar a la casa del padre de manera voluntaria.
Hasta el momento, hay interpuestas dos denuncias contra el acusado. En la primera de ellas, la mujer le acusa de malos tratos, pero después no quiso declarar contra él y el hombre fue absuelto. La segunda, que le acusa de un delito de malos tratos y dos de coacciones, está a la espera de una fecha para la celebración del juicio.