Volvemos a la zona de
discotecas donde salió Caroline la noche de su desaparición: según la
declaración de Justin, la última persona que habría estado con ella. A las
cinco de la mañana la pandilla echó a correr al aparecer los Mossos y Justin
dijo que la vio durante unos 30 metros y que luego la perdió de vista.
Su versión es que él se
fue hasta el Castillo de Can Feu, a 15 minutos a pie, para esconderse de los
agentes. Se sabe que sobre las
seis de la mañana se realiza una llamada desde el teléfono de Caroline en la estación
de Sabadell. Una llamada a Silvia, la
amiga con la que Caroline dijo que dormiría esa noche.