Un juzgado de Ávila ha abierto una investigación contra el alcalde de Vita, Antonio Martín Hernández, quien entonó una canción que incitaba a la pederastia durante las fiestas del pueblo. De hecho, el juez estima en su auto que ha podido cometer un delito de corrupción de menores. Le tomará declaración el 19 de mayo del año que viene tras la denuncia de diferentes asociaciones.
Los hechos ocurrieron el pasado mes de septiembre, cuando el primer edil del consistorio abulense se subió al escenario y entonó la bochornosa canción que incluía estrofas como: "La metí en mi camita, la subí la faldita, la bajé la braguita", "La eché el primer caliqueño" o "El tercero ya no queda leche, el tercero ya no hay quien lo eche, ya no queda leche".
Fue tan clamoroso que se pronunció hasta la Conferencia Episcopal, aunque con un discurso poco acertado. Su presidente, Luis Argüello, aseguró: "Me parece reprobable, pero también hay que poner las cosas en su contexto, conociendo lo que pasa a altas horas de la madrugada". Martín Hernández pidió disculpas, aunque de manera muy laxa: "Si alguien se ha sentido ofendido, lo siento mucho".
El Partido Popular le expulsó del grupo, pero sigue siendo alcalde, gracias a otro exedil del PP que se negó a apoyar una moción de censura contra él. Martín Hernández pidió disculpas,