Son los dos primeros
casos de Fiebre Hemorrágica Crimea Congo en Europa Occidental. El primer
paciente se contagia a través de la picadura de una garrapata en una excursión
en la provincia de Ávila. El hombre, de 62 años, ingresa en el Hospital Infanta
Leonor y cuenta que le ha picado un ácaro. Su diagnóstico no levanta sospechas
porque no ha viajado a zonas de riesgo.
"No se sospechó que el
paciente tenía fiebre hemorrágica porque no había viajado al extranjero",
explica Yolanda Fuentes, directora general de Salud Pública.
Fallece el 25 de agosto,
solo cuatro días después de su muerte una enfermera que le ha tratado empieza a
presentar los mismos síntomas que él. Es entonces, dice la Consejería, cuando
se activan todos los protocolos y la mujer es trasladada hasta la unidad de
aislamiento del Carlos III. Ahora investigan cómo pudo contagiarse.
"La paciente no tuvo
ningún accidente biológico. Sólo la exposición habitual a un paciente en la UCI",
señala Fuentes. Por eso, la Consejería vigila a 200 personas del entorno de los
dos contagiados. Deberán permanecer 21 días en observación.
Con una letalidad de
entre el 10% y el 40% este tipo de fiebre hemorrágica se transmite a las
personas por la picadura de garrapatas infectadas o por contacto directo de
sangre y secreciones con alguien contagiado. El período de incubación varía
entre 5 y 13 días y sus síntomas comienzan de forma súbita. De momento no hay
ninguna vacuna contra el virus.