Son el dulce objeto de deseo que inunda las pastelerías en Semana Santa. Una explosión de color y creatividad que no puede faltar en ninguna mesa catalana.
"Para la pastelería además de ser un momento momento muy bonito, la gente va mucho a ver las pastelerías, va mucho a ver los escaparates, los niños están esperando a que llegue este día... A nivel económico es muy importante, se hace una caja bastante considerable", comenta Saray Ruiz, pastelera.
El chocolate es el ingrediente estrella de cualquier mona de pascua. Este tradicional postre que en Cataluña se regala a los niños y donde el huevo es la forma principal a partir de la cual se desarrollan auténticas obras de arte que pueden variar de temática.
Cada una de ellas puede conllevar una elaboración de tres horas y este año se consumirán más de 700.000.
El tradicional bizcocho con huevos, pollitos y plumas, comparte protagonismo con las monas de autor. La imaginación toma forma de animales o personajes fantásticos.
"El que siempre sale es el que los niños piden. Los niños son los que marcan las ventas muchas veces. La pastelería realmente dedica un porcentaje bastante alto al que está de moda este año", afirma Oliver Fernández, director de Escuela Gremio Pastelería de Cataluña.
Incluso las estrellas de la gran pantalla, sin olvidar los clásicos, que harán las delicias de los más golosos.