Indignación y sorpresa entre los padres que han acudido al colegio en Barrio de Son Roca, en Palma de Mallorca. Los presuntos agresores ya identificados han acudido como un día más a clase. "Luego que se solucione todo lo demás, pero primero que los expulsen", pide una madre. "Esta gente ya no debería haber asistido este lunes al colegio", lamentan. "He traído a mi hija, como he visto que los supuestos agresores estaban he decidido llevármela", explica otra madre.

Una decisión que han tomado muchos padres, porque aseguran que sus hijos tienen miedo, sobre todo los que presenciaron la brutal paliza. "Me contó cómo le pegaban y le pisaban la cabeza", recuerdan y señalan que "si mañana vuelven a venir los niños" no traerán a sus hijos.
La menor tuvo que acudir al hospital con un fuerte dolor abdominal, está muy afectada y creen que necesitará ayuda psicológica, lo mismo que su su hermana de 12 años que presenció la agresión. "Cuando pasó, vino un niño a avisarla y fue corriendo a ver que pasaba", explican.
Ambas, según la familia, eran acosadas, algo que ya habían puesto al menos en dos ocasiones, en conocimiento del centro Y niegan que se trate de algo puntual como aseguró el ministro del Interior. "Siempre esteban recibiendo agresiones, insultos y amenazas", explica Melisa Suero, hermana de la menor agredida. Por su parte, el centro tiene previsto reunirse este lunes con todos los padres de los alumnos.

Tienen miedo a represalias
Los repartidores de Barcelona denuncian la precariedad laboral que sufren: jornadas interminables, sin descansos...
El contexto Los repartidores están en una situación límite dada su precaria jornada laboral donde tienen miedo a represalias por denunciar las condiciones en las que trabajan.