Después de que los Mossos desplegaran diversos dispositivos por El Catllar y por poblaciones cercanas a Tarragona, los controles se mantienen en los barrios periféricos de Tarragona y Reus, donde el preso fugado podría tener contactos y personas conocidas.

El huido, Manuel L.P., de nacionalidad española, vecino de Reus y preso por diversos robos con intimidación, se fugó junto con otros dos reclusos, que luego fueron detenidos y con los que no tenía ningún tipo de relación. 

Después de saltar la valla perimetral de la prisión y huir, Manuel, de 30 años, se dirigió hacia el cercano Hospital Joan XXIII.

Los otros dos reclusos fugados, el venezolano Guillermo G.S.y otro preso español, intentaron salir de la cárcel juntos, pero este último fue inmediatamente detenido al lado de la cárcel cuando pretendía robar el coche a una mujer que estaba aparcando en ese momento.

Por su parte, Guillermo G.S. fue detenido unas horas después cuando caminaba cerca de El Morell.

Los tres hombres se fugaron el lunes aprovechando la confusión que causó el suicidio de un preso en la enfermería. En el momento de los hechos, había en la prisión de Tarragona una quincena de funcionarios para 415 reclusos.