Un niño de tres años ha muerto, posiblemente por un golpe de calor, después de haberse quedado atrapado dentro de un coche en Riópar, Albacete, donde veraneaba con su familia. Se habían desplazado desde Barcelona a pasar las fiestas, como todos los veranos.
El niño aprovechó un descuido de sus padres, que estaban dentro de la vivienda, para colarse en el coche familiar del que ya no supo salir. Estuvo dentro del vehículo apenas unos minutos, según los allegados de la familia, pero cuándo los padres se dieron cuenta ya era demasiado tarde. Lo trasladaron rápidamente al centro de salud donde lo intentaron reanimar sin éxito durante una hora.
El suceso ocurrió a las 17:30 horas, cuando el termómetro marcaba 30 grados en el exterior. La Guardia Civil aún está investigando las causas de la muerte. Fuentes municipales apuntan a una posible indisposición del pequeño en el interior del coche, y también se baraja un golpe de calor.
"Puede empezar por mareos, calambres, vómitos, sensación de que la persona se va adormeciendo, y si eso progresa finalmente termina en la muerte", explica María Isabel López, jefa del departamento de operaciones del SAMUR.
El ayuntamiento a decretado dos días de luto y ha suspendido todos los actos culturales. A falta de conocer el resultado de la autopsia, todo apunta a un accidente.