Hace frío, mucho frío, algo que no tendría que ser noticia porque estamos a principios de año. Sin embargo, esta vez se trata de una ola de frío siberiano, algo que no veíamos desde hace tres años.

En Madrid es un día ideal para jugar al quién es quién, porque la gente se tiene que abrigar hasta la cabeza, con rachas de aire que bajan hasta seis grados la sensación térmica.

En Sigüenza, Guadalajara, las bombonas traen gas y escarcha, con unas temperaturas mínimas de cinco grados bajo cero, aunque con paisajes que parecen un museo.

Por su parte, en Lugo la temperatura es de cero grados, con un frío y una humedad que está haciendo sufrir a los vecinos, que casi prefieren quedarse en la cama para huir del frío.

Hasta Granada ha llegado el frío, donde se puede ver a los vecinos paseando con el pijama debajo de la ropa y paisajes cubiertos de hielo y escarcha. Las temperaturas bajo cero convierten algunas zonas de España en lugares fantasma.