El último capítulo de una pesadilla, así describen los Padres de Marta del Castillo el día de ayer, un día de muchos nervios y una gran decepción.

La esperanza se desvaneció, pero creen en el trabajo de la Policía que les insisten en que están seguros de que el cuerpo de Marta fue enterrado en la escombrera de Camas, por el test de la verdad y las señales del móvil de Carcaño la noche que desapareció su hija.

A quien también han querido enviar un mensaje es a Miguel Carcaño. La madre de Marta le ha calificado como la reencarnación del mal un torturador, un mentiroso y quiere que no se le proteja en la cárcel.

La aparición de los huesos que no son los de Marta es el último golpe emocional para una familia que lleva cinco años sufriendo, y que no pueden pasar página. Según Antonio del Castillo, la búsqueda en la escombrera terminará en dos o tres días.