Por los temporales, por la llegada de precipitaciones producidas en tierra que desembocan en el mar o cuando las olas entran hacia la playa y quieren salir la barra se rompe.
Todo ese mar, de nuevo mar adentro, genera una corriente que puede llegar a arrastrarnos, una corriente muy peligrosa cuando el mar entra y quiere salir de nuevo de la playa.
Si nos vemos metidos en una de esas corrientes, no tratemos de nadar de forma directa a la playa, si no, que tendremos que salir de forma paralela a la costa para huir de esa corriente, no agotarnos y volver de nuevo a la playa.
Las playas se quedan vacías
Las altas temperaturas provocan la proliferación del mucílago, una microalga que invade el mar Adriático (Italia)
Los expertos aseguran que el mucílago no es perjudicial para la salud y la calidad del agua del Adriático sigue siendo óptima para el baño, aunque los veraneantes se niegan a meterse debido al aspecto del agua y al mal olor que desprenden.