El jefe de investigación de laSexta Manu Marlasca ha tenido acceso en exclusiva al atestado de la Guardia Civil sobre el ritual chamánico del sapo bufo en el que perdió la vida el fotógrafo José Luis Abad en juliode 2019. El atestado recoge todo el visionado del ritual, que apareció en un vídeo en el móvil de la víctima. En las imágenes, de extrema dureza, puede verse cómo el actor porno Nacho Vidal actuaba como líder de la ceremonia mientras Abad se sometía voluntariamente al mismo.
A través de diversas imágenes se puede observar al actor,detenido el pasado 3 de junio por presunto homicidio imprudente, como 'gurú' mientras Abad se somete al consumo de la denominada 'molécula de dios'. Nacho Vidal insta al fotógrafo a ingerir la sustancia para, posteriormente, retirarle la piedra de la nariz. Solo llevan 23 segundos de ritual cuando la víctima comienza a tambalearse, cae desplomada y empieza a convulsionar.
Sin embargo, Nacho Vidal continúa con el ritual haciendo sonar una percusión. A partir del primer minuto, comienza a hacer maniobras de reanimación al fotógrafo, un extremo que ya contó su abogado la semana pasada en Expediente Marlasca, cuando afirmó que no hubo omisión de socorro y que se hizo lo necesario para salvar la vida de José Luis Abad.
Así se puede observar en las imágenes a las que ha tenido acceso Manuel Marlasca y que no serán reproducidas en este artículo por la posibilidad de herir sensibilidades. En ellas se aprecia cómo el actor intenta reanimar a Abad, si bien es cierto que el atestado las cataloga como insuficientes e incluso apunta que el 'guía' de la ceremonia continuó con el ritual a pesar de la evidente situación extrema del fotógrafo, algo que se puede observar en el color de piel y en el aparente anquilosamiento de sus extremidades.
A los 14 minutos de la grabación, y después de que el actor porno le haya realizado maniobras de reanimación y le haya echado agua en numerosas ocasiones, José Luis Abad permanece boca-abajo en el suelo, aparentemente ya fallecido.
Aun así, el acompañante de Vidal y el propio actor decidieron continuar con la ceremonia, e incluso se puede apreciar cómo se continúa tocando la percusión, al menos, hasta ocho minutos después, cuando finaliza la grabación.